Es una marca que estará contigo toda la vida. Así que antes de tomar la gran decisión, necesitas evaluar muchísimos puntos que te ayudarán a evaluar de manera acertada.
Un tatuaje es algo especial y lleno de significado. Lo mejor es que cada vez que lo mires, puedes recordar la razón por la que te lo hiciste. Esas son algunas de las consideraciones que necesitas tener antes de sentarte en la silla con tu tatuador.

#1-La razón
¿Ese tatuaje que tienes pensado lo quieres hacer por una razón personal o porque alguien te está convenciendo? Un tatuaje te acompañará por siempre y las razones deben ser bien personales.
#2-El diseño
La obra de arte que va en tu piel debe ser una bien elegida. Tómate tu tiempo para elegir un diseño bonito. Busca ayuda de alguien que sepa lo que está haciendo. Imagínate tener una mariposa que luzca horrible, ¡qué mal!

#3-Parte del cuerpo
¿En la espalda, el cuello, la mano? Piensa si el lugar donde te hagas tu tatuaje te podría de alguna manera afectar en el futuro. Aunque tener un tatuaje no es nada malo, en algunos lugares de tu cuerpo te podría afectar a la hora de comenzar un trabajo. Además piensa en los cambios en tu cuerpo.
#4-Espera
Aunque estés ansiosa por un tatuaje, necesitas tener bien claro que como dicen por ahí, “lo barato sale caro”… Elige un artista que sepa lo que está haciendo y si se te sale del presupuesto, espera hasta que puedas juntar el dinero que necesitas.

#5-¿Estás 100% segura?
Cuando ya hayas pensado los puntos anteriores, piensa nuevamente si estás completamente segura del paso que darás. Esa marca estará contigo por siempre. ¿Lo estás? ¡Manos a la obra!
nota de: iMujer